Algunos fines de semana, como este último que ya ha pasado, le pido a Congo, que siembre en mi vientre un huerto: lechugas, zanahorias, remolacha, calabacín, tomates...
Congo, con la paciencia y la sabiduría de un agricultor, comprueba las fases lunares, la humedad de la tierra... Y me siembra. Sabe que me hace bien tener algo que cuidar, los días que él no está conmigo.
A su regreso, el próximo fin de semana,
recogemos la cosecha, los dos juntos.
... y es que me hace volar,
como el águila que vuela en libertad,
sobre el valle lejos de la tempestad,
como el viento cuando cruza la ciudad,
con el rumbo fijo sin mirar atrás.
No, no sé qué me das que me hace volar.
¡Jajaja! Eres genial. Que la siembra se repita muchas veces.
ResponderEliminarY no hagáis barbecho, salvo por causa de fuerza mayor.
Un abrazo.
Mira que apañados.
ResponderEliminarY ecológicos.
:)
Besos.
Siempre es genial leerla con alguien:
ResponderEliminar-¿Has leído a Aldabra?
- Si hace un momento…No, no sé qué me das que me hace volar.
- Sí, ya, ya sé que termina así
- No, es eso, es que no sé que me das TÚ a mi que me hace volar…
- Te extraño
- Te quiero
Venga, un beso
llama tú luego
Muy bueno y sobre todo original a la par que muy ecológico como dicen por ahí arriba, jajaja.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho!!!
Besos.
Tal vez... Café???... jeje... no, nada... es que eso dice la canción del Miguel. :))
ResponderEliminarHa sido muy bonito. Sí.
Besicos.
Cómo me gusta la piel de la mujer amada.
ResponderEliminarQué linda comparación de tu vientre con la madre tierra, y claro que sé que no te siembra de frutas y hortalizas!! pues tontín no soy!!
ResponderEliminarTU SI Q VALESS....
ResponderEliminarDeliciosa imaginación...
ResponderEliminarQue la cosecha os sea de provecho.
Una sonrisa
¿Tú conoces una canción de Juan Luis Guerra que dice "reforéstame el amor de ayer, siembra una tarea de cariño en mi corazón, dale de beber, mi tierra es de la buena, tu siembra será cosecha una vez más"?
ResponderEliminarPues eso.
“Canción del Esposo Soldado ” Mguel Hernandez.
ResponderEliminarHe poblado tu vientre de amor y sementera,
he prolongado el eco de sangre a que respondo
y espero sobre el surco como el arado espera:
he llegado hasta el fondo.
Morena de altas torres, alta luz y ojos altos,
esposa de mi piel, gran trago de mi vida,
tus pechos locos crecen hacia mí dando saltos
de cierva concebida.
Ya me parece que eres un cristal delicado,
temo que te me rompas al más leve tropiezo,
y a reforzar tus venas con mi piel de soldado
fuera como el cerezo.
Espejo de mi carne, sustento de mis alas,
te doy vida en la muerte que me dan y no tomo.
Mujer, mujer, te quiero cercado por las balas,
ansiado por el plomo.
Sobre los ataúdes feroces en acecho,
sobre los mismos muertos sin remedio y sin fosa
te quiero, y te quisiera besar con todo el pecho
hasta en el polvo, esposa.
Cuando junto a los campos de combate te piensa
mi frente que no enfría ni aplaca tu figura,
te acercas hacia mi como una boca inmensa
de hambrienta dentadura.
Escríbeme a la lucha, siénteme en la trinchera:
aquí con el fusil tu nombre evoco y fijo,
y defiendo tu vientre de pobre que me espera,
y defiendo tu hijo.
Nacerá nuestro hijo con el puño cerrado,
envuelto en un clamor de victoria y guitarras,
y dejaré a tu puerta mi vida de soldado
sin colmillos ni garras.
Es preciso matar para seguir viviendo.
Un día iré a la sombra de tu pelo lejano,
Y dormiré en la sábana de almidón y de estruendo
cosida por tu mano.
Tus piernas implacables al parto van derechas,
y tu implacable boca de labios indomables,
y ante mi soledad de explosiones y brechas
recorres un camino de besos implacables.
Para el hijo será la paz que estoy forjando.
Y al fin en un océano de irremediables huesos
tu corazón y el mío naufragarán, quedando
una mujer y un hombre gastados por los besos.
Bicos y que germines en los brazos de Congo.
después de leer el poema de miguel hernández,
ResponderEliminartan desgarrador,
de verdades desnudas como cuerpos,
la sangre y el fuego,
con la tristeza de los muertos cuya muerte ha sido inútil,
todos esos puños en alto que cerraron los ojos bajo las balas,
la desesperanza.
después, qué puedo decir con este impacto!
Que me sorprendes en tus entradas; que vas dejándote llevar para expresarte, dejando que te salga la vena creativa.
Un beso de lluvia para tu huerto!
;-)
Que entrada máis frutífera! Desexo que a sementeira sexa moi, moi xenerosa e a colleita abondosa.
ResponderEliminarBicos
Me gusto.. eso es entrega..
ResponderEliminarUn abrazo
Con mis
Saludos fraternos de siempre...
Qué susto! pensé que estabas embarazada...
ResponderEliminarBesicos
Jo.
ResponderEliminarQué bonito, Aldabra...
Simbólico, erótico y bonito...
Un beso!
ya que Carlos nos ha dejado aquí un hermoso poema de Miguel Hernández, quiero añadir también este otro suyo, que versionó Joan Manuel Serrat, por si queréis escucharlo:
ResponderEliminarMenos tu vientre,
todo es confuso.
Menos tu vientre,
todo es futuro
fugaz, pasado
baldío, turbio.
Menos tu vientre,
todo es oculto.
Menos tu vientre,
todo inseguro,
todo postrero,
polvo sin mundo.
Menos tu vientre,
todo es oscuro.
Menos tu vientre
claro y profundo.
biquiños,
Que bien manejas la metáfora.
ResponderEliminarEspero que pronto tengas el jardinero todos los dias.
Un beso
Metáfora de vida, metáfora de amor. Paranomasia de sabores que se estenden polo teu ventre, frutífero, fructificado. Xenial!!
ResponderEliminargrazas aldabra!
ResponderEliminarqué riquiña es!
:-)
estás en todo
este é o enlace ó poema de miguel hernández que me fai sentir o marabilloso que é ser muller
http://www.youtube.com/watch?v=kdzevcARdIw
(claro que, mellor, cando o ventre é cobizado e non esquecido!)
La foto es extraordinaria.
ResponderEliminarTiene textura pictórica.
Impresionado.
Hermosa sintonia la que ambos teneis, y ello me complace, por que las cosas buenas alegran el alma.
ResponderEliminarCreo que te da lo que necesitas, por eso puedes volar, sin mirar atras.
Que sigan esos vuelos durante muchisimos años.
Un beso
un dos mellores post que che teño lido.
ResponderEliminarnoraboa poeta.
me gusta esa forma de sembrar. Os deseo una buena cosecha!
ResponderEliminarUn beso.
As fases lunares son moi importantes e compre telas en conta. A humidade pódese regular propiciandoa axeitadamente.
ResponderEliminarPero xa vexo que logrades boas tomateiras. Imaxino que tamén lle poredes pimentiños de Padrón, que -como sabes- uns pican e outros non...(o picante que non falte!)
Bicos sementados
Lo que yo digo: la tierra gallega no necesita barbecho.
ResponderEliminarPaso a saludar porque vengo de la de Zeltia y me llamó la atención tu comentario.
Saludos
Te estoy siguiendo aunque en las dos o tres últimas entradas, no haya comentado. Sé a la amiga que te refieres: recuerdo el apunte en tu entrada. Yo tengo una también así, pero sí sé qué ocurrió (nada evitable por mi parte).
ResponderEliminarEstoy siguiendo, intermitentemente a la "abeja" y me alegra su última entrada.
Un beso enorme.
Maravillosa la manera en que Congo y tú llenais la espera. Luego se saborean más los frutos.
ResponderEliminarBiquiños
Con un agricultor como ese, así cualquiera!.
ResponderEliminarMe imagino que esas cosechas no tendrán pesticidas ,je,je,.Biquiños
Pues qué va a ser, amor, amor amor...
ResponderEliminarEspero que salgan unos frutos preciosos.
Besos para ti y para tu excelente agricultor.
MUCHÍSIMAS GRACIAS a todos por dejar vuestros comentarios.
ResponderEliminarbiquiños,