O Cebreiro namora ó viaxeiro
de corazón verde.
O Cebreiro enamora al viajero de corazón verde.
El viento de la montaña.
La ropa tendida.
O ir e vir de persoas de moi diferente condición e sentimento,
paseando sin prisa calquera día do ano.
El ir y venir de personas de muy diferente condición y sentimiento, paseando sin prisa, cualquier día del año.
O Cebreiro non é mais que unha ducia mal contada de casiñas.
O Cebreiro no es más que una docena mal contada de casas.
Alguna palloza.
Unha igresa pequerrechiña e humilde.
Una iglesia pequeñita y humilde.
Un cruceiro.
Un crucero.
Pero aínda así, con só esas pequenas cousas,
namora o viaxeiro que ten lume no peito.
Pero aún así, con solo esas pequeñas cosas, enamora al viajero que tiene fuego en el pecho.
A apacíbel convivencia de uns e outros.
La apacible convivencia de unos y otros.
Os pelegríns que percorren o Camiño.
Los peregrinos que recorren el Camino.
A simboloxía dos antergos.
A maxia.
La simbología de los antepasados. La magia.
Las conchas.
Los bastones.
Chegar ó Cebreiro, semella doado.
Difícil é decirlle adeus,
sin saber cando imos voltar.
Mais queda en nós, o sabor do seu queixo,
da empanada.
O recordo daquel agasallo
que compramos pensando nun amigo.
E todo o ár que bebimos entre as súas pedras.
Llegar al Cebreiro, parece fácil. Difícil es decirle adiós, sin saber cuando vamos a volver.
Más se queda dentro de nosotros, el sabor de su queso, de la empanada. El recuerdo de aquel regalo que compramos pensando en un amigo.
Y todo el aire que bebimos entre sus piedras.
23 comentarios:
Que felices viven los perros...
No tienen exámenes, ni buscan trabajo, ni están todo el día cavilando como ser felices.
Ya sé que el post es más amplio pero esto es lo que me inspiró.
Besos.
Me has hecho recordar el Camino y esos lugares, incluidos los perros, cuando pasé por ellos.
Besos.
Me encanta la apacible convivencia, la foto es encantadora y el título genial. Un beso.
É certo co Cebreiro namora. Estiven eu hai pouco tempo, máis era ao solpor e non tiven unha luz tan axeitada coma a tua para facer as fotos. É un lugar meigo.
Boa música a que nos dedicas.
Unha aperta, con agarimo.
¡Me encantan todos los símbolos celtas!
Algún día veré todo eso en vivo y en directo.
Besos
Esta é outra terra que me queda por visitar.
Calquera día !.
¡Preciosas las fotos! (y la lección de galego)... Yo también quiero ir por Galicia este año y no me perderé ¡O Cebreiro! Besotes, M.
Seguir tu huella por las tierras gallegas es un soplo de tradición y sosiego. La sencillez no necesita más que una choza para expresar toda la grandeza que lleva dentro.
Un abrazo
Es no de esos lugares en el que uno puede echarse y respirar tranquilidad y aire puro...
Bsos.
Mira que recordo máis fermoso che queda!
A min gústame atesourar recordos no blog tamén, inda que só sexa unha mostra, un fiiño do que se eu tiro, véñenme á mente o resto que non escribín. (coma ese das cereixas, que foi un agasallo que fixen o outro día, pero para min as cereixas significan verán, sol, a vida latexando, o entusiasmo, a xuventude, o amor, o sexo; o tempo de v i v i r)
Moita envexa me das, sempre dun lado para o outro; descubrindo paisaxes, probando comidas, acumulando experiencias, osixenando a cotidianidade para que non colla valor.
Un bico, queridiña.
Precioso, cálido y sereno recorrido.
No me extraña que hayan quedado enamorados del pueblo.
Besos
Me gusta todo tu reportaje; aunque me quedo con la ropa tendida. Y las pallozas...por supuesto.
Biquiños
Esta entrada me ha traído recuerdos a tierra y a verdad. Qué belleza.
Besos.
Hostia, Aldabra: atopácheslle o carro a Manolo Escobar!!!!. Vaste facer de ouro. Espero que te acordes dos amigos blogueiros...
Yo siempre he dicho que en lo sencillo está la belleza. Precioso el Cebreiro. Biquiños
Sentín lume no peito vendo o que me mostras.
Máxico é este lugar...
Un saúdo.
Un recorrido entrañable por lugares donde la mágia de la sencillez de adueña del visitante.
Me ha encantado, muchas gracias por compartirlo.
Que bello lugar con encanto!
Un placer leerte saludos;)
Qué bonito!! Me ha encantado la palloza y los trisqueles celtas, esos me pirran...no sé cuántos pendientes tengo con ellos jjj
Besos obesos
Algún dia, algún día llegaré allí.
Me ha encantado.
Biquiños
Te felicito por tan bello reportaje... ¡Ay, si no fuera por estos tiempos que corren!... pero como dice Elena, algún día.
Un abrazo
Y no veas el alivio que siente el peregrino después de la cuestecita de marras. Te parece todo bonito. Y además, lo es.
Besos.
Es un lugar precioso para encontrar un poco de paz en estos tiempos tan complicados.
Buen día
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